Tela tipica paraguaya Ao poi, bordada y teñida.

Es difícil controlar todo en la vida, el mito nos sirve para recordar y controlar nuestros miedos. Sin embargo, cuando amamos de verdad no nos importa perder el control, nos dejamos llevar por el impulso, sentimiento embriagador des controlado a ser controlado. El arte en si, rompe barreras, e impone ideas, dejando de lado los tabues y los miedos. Acaso el arte no es amor?, no es un momento en el que el artista expresa sus sentimientos para que el mundo sepa lo que esta pasando en la sociedad? , dentro del propio artista? o en la raíz de una cultura?
Si no fuera por un horno apagado, pero con unos cigarros y un poco de caña, muchas niñas estaríamos en peligro con el POMBERO. Gracias a que seguimos unos pasos establecidos por el mito nos salvamos de situaciones por la que no queríamos pasar.
Pero que pasa si nos dejamos llevar o se olvidan de dejar los recursos dados por el mito, es decir, seguir los pasos establecidos. Si nos dejamos llevar por la locura?
Lo mismo , siempre lo mismo, que pasaría si esto, que pasaría si lo otro..El impulso que te lleva a hacer lo correcto, si algo sale mal, es una decisión mal tomada. Si la tela sale mal, es un paso atrás, sin embargo, siempre cumplira la función de tapar vestir, adornar, cuidarnos y cuidarnos. La trama, el cruce de hilos junto con las anilinas son parte de nosotros ahora. Es un buen momento para empezar a disfrutar de este impulso y ver cuales son los pasos siguientes a dar. Lo tienes ahí, frente tuyo, esta mal o bien, pero esta y quizás hasta te guste.